Descubra todo lo que hay que ver en Shanghái

Tradición y modernidad. Estos son de las propuestas que presenta la ciudad de Shanghái al visitante. Adentrarse por sus calles le permitirá ir descubriendo todo lo que hay que ver en Shanghái: desde sus monumentos históricos y los edificios que son la muestra de su pasado colonial, pasando por sus templos y sus jardines, como el famoso Jardín Yuyuan, hasta llegar a la parte más moderna de la ciudad, formada por decenas de rascacielos, entre los que se encuentran algunos de los más altos del mundo.

Conocida como la Perla de Oriente, una de las primeras atracciones que hay que ver en Shanghái es el afamado Jardín Yuyuan, en el centro de la ciudad antigua. Desde el muro que rodea este reciento de 2.000 metros cuadrados, conocido como el Muro de los Cinco Dragones, por las cinco cabezas de dragón que se encuentran en él, hasta la espectacular Piedra de Jade –de 3,3 metros de altura y 72 agujeros naturales-, todo llamará su atención este jardín que fue diseñado en el siglo XVI. El complejo está formado por una serie de edificios de estilo tradicional entre los que se entremezclan pequeños estanques y jardines que le invitarán a pasear y relajarse.

Tras el Jardín Yuyuan, su siguiente visita en Shanghái debe ser el Templo de Buda de Jade, que fue construido para albergar dos espectaculares figuras de Buda esculpidas en jade blanco. Estas dos estatuas, que representan a Buda sentado y a Buda reclinado, aún se encuentran en dos salas distintas del templo, pero además en el Gran Salón de la Magnificencia podrá contemplar otras tres imágenes que muestran a Buda en tres diferentes formas. En esta misma sala también se encuentran representados los veinte arhats, los guardianes del budismo.

Aproveche el atardecer para pasear por el Bund, nombre que le dieron los británicos a la zona del malecón de Shanghái y que hoy conserva algunos de los edificios de arquitectura colonial más bonitos. De entre ellos, destaca el edificio de la Aduana de Shanghái y el edificio del Banco de China. Y también debe pararse a contemplar el Banco de Desarrollo de Pudong, antes Banco de Hong Kong y Shanghái, y el Hotel Peace y su techo piramidal en color verde.

Desde el Bund podrá disfrutar de unas vistas inigualables del Pudong, la zona en la que se encuentran la mayor parte de los 8.000 rascacielos de la ciudad de Shanghái. Esta área se ha convertido en el centro financiero y comercial de la ciudad, y también de China, y en ella han asentado sus sedes de las principales compañías extranjeras. De entre los espectaculares edificios que se han levantado en esta zona sobresalen la Torre Perla Oriental, con su impresionante diseño con cinco esferas; la Torre Jin Mao y el Shanghái World Financial Center.

Aproveche la ocasión para visitar el Museo de Shanghái, que contiene algunas de las reliquias chinas más valiosas, en concreto nada más y nada menos que 120.000 piezas de distintas épocas y distintos materiales. Este edificio se encuentra en la Plaza del Pueblo, que se levantó en el antiguo hipódromo de la ciudad. Otras construcciones que se encuentran en este emplazamiento son el Gran Teatro de Shanghái, el Salón de Exposición de la Planificación Urbanística –Shanghái acogió la Exposición Universal 2010 sobre el urbanismo del futuro- y el Edificio Gubernamental Municipal.

De esta plaza parte la mítica calle peatonal Nanjing, donde podrá encontrar numerosas tiendas y comercios donde comprar todo tipo de objetos y recuerdos. Además, le sorprenderán sus grandes letreros luminosos, una de sus señas de identidad.